La reforma de la Caja jubilatoria del BAPRO sigue generando controversias luego de la media sanción que le dio el Senado en una sesión especial donde el Cuerpo fue solo convocado para el tratamiento de ese expediente.
En la Cámara Alta, el oficialismo se aseguró la mayoría simple por el acompañamiento en aquella ocasión de los tres libertarios disidentes que conduce Carlos Kikuchi.
Si bien en ese momento se produjo un contrapunto entre la jefa del bloque peronista Teresa García y Alejandro Rabinovich, espada de Guillermo Montenegro y titular de la tribu amarilla, por la interpretación de las mayorías necesarias para aprobar la propuesta del Ejecutivo, finalmente el oficialismo impuso su criterio y la propuesta fue girada a Diputados.
Pero la cuestión no acabó allí, el expediente espera una sesión extraordinaria en Diputados para tomar entrada formal pero el jefe de la bancada amarilla Agustín Forchieri, el radical abadista Diego Garciarena y Maricel Etchecoin Moro, que encabeza la tropa de la Coalición Cívica, le pidieron al titular del Cuerpo Alejandro Dichiara que devuelva el proyecto al Senado por improcedencia en la metodología de tratamiento.
Objetan que la iniciativa no pasó por las comisiones asignadas en el Senado, solo tenía el visto bueno de Presupuesto e Impuestos, y por ende necesitaba de los dos tercios del Cuerpo lo cual se convertía en una empresa compleja para el oficialismo debido a la resistencia que la propuesta consensuada entre Axel Kicillof y La Bancaria generaba en los bloques amarillos y centenarios.
El proyecto nace a raíz de pedido de la Corte Suprema provincial al Ejecutivo de una solución política ante la catarata de demandas contra el régimen sancionado en 2017 que subía la edad jubilatoria para la mujer a los 65 años, bajaba del 82% al 75% el promedio de haberes y fundamentalmente ataba los aumentos salariales a la formula de ANSES: este último punto generó la mayoría de las presentaciones en la justicia.
Es por esto que a razón de evitar una sangría en las arcas provinciales, el Máximo tribual juntó en una mesa a los representantes de los bloques políticos de la Legislatura y les exigió perentoriamente que consensuen una acordada para evitar un dañó devastador a las finanzas del Tesoro bonaerense.
Si bien tanto la oposición del PRO somo de la UCR preferían que siguiese el actual sistema votado durante la administración de María Eugenia Vidal, se mostraban contemporizadores con la posibilidad de avanzar en el cambio de fórmula y reedireccionarla de la ANSES a la paritaria bancaria.
Objetaban fuertemente que la provincia utilice recursos propios para enjugar el déficit de la Caja jubilatoria en desmedro de costearlo con las utlidades del Banco como lo determinó la reforma de 2017.
Lo cierto es que luego de la presentación de los tres bloques que integraban otrora Juntos por el Cambio pidiendo a Dichiara la devolución del expediente al Senado, la pelota ahora está del lado del oficialismo de Diputados que deberá resolver en consecuencia.
En rigor, fuentes cercanas a la conducción de la Cámara Baja le cuentan a PDS que no es factible la devolución del expediente al Senado porque, según cuentan, el reglamento interno de aquel Cuerpo justifica la votación que se llevó adelante allí.
“Salvo en endeudamiento, impuestos y nombramiento de jueces nos se necesitan los dos tercios por lo que al haberse celebrado en el marco de una sesión espacial todo estuvo en regla”, interpreta una fuente legislativa ligada al oficialismo de Diputados.
Lo cierto es que la disyuntiva está plateada, el peronismo defiende con uñas y dientes la conclusión de que la sesión especial de la Cámara Alta habilitó los apoyos por mayoría simple mientras que los representantes del PRO, radicalismo y Coalición Cívica sostienen a capa y espada que la propuesta no pasó por las comisiones asignadas por lo que lo convierte en un tratamiento inválido.
Así las cosas, según pudo recolectar este portal es un hecho que finalmente el oficialismo de Diputados le de entrada al expediente para tratarlo en sesiones extraordinarias, aunque primero deberá conseguir los dos tercios necesarios ya que la propuesta no pasará por comisiones.
Unión por la Patria descuenta el apoyo de los ex libertarios dialoguistas y buceará un entendimiento con los radicales disidentes que responden a Facundo Manes con la intención de buscar un atajo a la resistencia que esbozan desde el PRO, el radicalismo abadista y la Coalición Cívica.
No descartan fuentes del bloque oficialista de la Cámara Baja que la propuesta pueda tener algún cambio respecto a la original votada en el Senado para conseguir nuevos apoyos, por lo que en ese caso debería volver a la Cámara de origen y otra vez se abriría otra vez el abanico de interpretaciones respecto a las mayorías necesarias para su definitiva sanción.