En el PRO bonaerense descuentan una alianza electoral con el mileísmo en 2025

El PRO atraviesa por una crisis existencial en la provincia de Buenos Aires luego de la dura derrota que sufrió en el 2023 que terminó desarticulando principalmente su esencia.

El bullrismo ya anexo sus fuerzas con el mileísmo y hoy la incógnita que atraviesa al universo amarillo macrista tiene que ver con la estrategia a seguir para el año entrante.

El PRO pone en juego más del 60% de las bancas propias en la Legislatura bonaerense por lo cuál el accionar futuro está preñado de interrogantes y nadie desea efectuar un paso en falso que los deje fuera de combate.

La nueva conducción de Cristian Ritondo ya decidió comenzar a recorrer las secciones electorales en las que se divide la provincia de Buenos Aires e impulsar la generación de circuitos de discusión con las bases amarillas y los alcaldes del palo para intentar recobrar algo de la identidad extraviada.

Si bien hoy el poder del macrismo en la estructura bonaerense es predominante, de hecho manejan la mayoría de las alcaidías que todavía le quedan al PRO, también detenta poco alcance.

La mayoría de los intendentes amarillos no tienen posibilidad de reelección en el 2027 y ante ese escenario de debilidad la ola violeta amenaza con llevarlos puestos en la elección de medio término: “Milei nos está poniendo entre la espada y la pared o cerramos con él o desaparecemos”, se sincera una fuente parlamentaria ante PDS.

La posibilidad de avanzar en un gran frente electoral con el mileísmo es una chance que la mayoría de los referentes distritales amarillos descuentan aunque por el momento prefieran la prudencia y evitar los pronunciamientos públicos al respecto

También cobra forma la posibilidad de que Diego Santilli pueda eventualmente ocupar los primeros lugares de una hipotética lista de confluencia con el mileísmo: el colo, Ritondo y María Eugenia Vidal superan con creces el scanner inquisidor del jefe Karina Milei.

Por ahora la confusión es el sentimiento que más predomina en la esfera amarilla y no hay por el momento indicios de que en el coto plazo esa situación se vaya a redimir.

En tanto, en la Cámara de Diputados se producirá en diciembre próximo el desembarco del ritondismo en la conducción del bloque con el zarantense Matías Ranzini que reemplazará, según lo oportunamente convenido, al santillistas Agustín Forchieri.

Mientras que en la Cámara Alta provincial el alfil del alcalde maplatense  Guillermo Montenegro, el ruso Alejandro Rabinovich, tiene lo boletos para continuar un año más en la manejo de la bancada amarilla tomando en cuenta que quién se había presupuestado que lo reemplazaría, el jorgemacrista Christian Gribaudo, se apoltronó en la Vicepresidencia Segunda del Cuerpo cuando corrieron de ese lugar a la bullrista Daniela Reich.

El macrismo no maneja todos los resortes partidarios, hay alcaldes con juego propio que podrían adelantarse y cerrar un trato con el mileísmo, antes inclusive que el propio ex presidente inicie algún tipo  de negociación.

Los hermanos Manuel y Santiago Passaglia, éste último intendente de San Nicolás, son un ejemplo de independentismo, pasearon ministros del Poder Ejecutivo nacional sin pruritos por el distrito metalúrgico, auspiciaron los vouchers sanitarios y tiene agenda propia con jefes comunales que juegan abiertamente con el león como el delatorrista alcalde de San Miguel, Jaime Méndez.

La mira puesta en el 2025

El partido fundado por Mauricio Macri cavila los movimientos a seguir, si bien en la intimidad descuentan que tiene pocas alternativas en la provincia para gambetear un acuerdo con el mileíso, también saben que son necesarios para evitar un triunfo del peronismo: “Las cuentas son claras, si vamos juntos ganamos la provincia, los violetas también nos necesitan”, hace cálculos un legislador amarillo ante este portal.

En esa línea,también se analiza desde el macrismo que de avanzar en un acuerdo integral con el principal armador violeta, Nicolás Pareja, deberán afrontar otra vez una convivencia forzada con un bullrismo despechado por haberlo desplazado del máximo órgano partidario bonaerense.

Asimismo se plantea un escenario dificultoso para la confección de las listas, ya que si bien el mileísmo se preservaría los principales lugares en la boleta de diputados nacionales tampoco se muestra demasiado propenso a ceder casilleros en las listas seccionales.

“El mileísmo quiere purismo pero también tendrán que darnos espacios porque si no vamos solos y aunque saquemos 5 puntos se los restamos a ellos, nos necesitamos mutuamente”, contemporiza un operador macrista ante este portal.

Según pudo recabar este medio, el macrismo tiene la decisión de no fusionarse con LLA sino solamente acordar electoralmente y de manera transitoria: temen quedar pegados si eventualmente el gobierno de Javier Milei no logra consolidar un rumbo económico de estabilidad y reactivación económica.