Gremios médicos se movilizaron contra la reforma sanitaria que plantea el gobierno

La ministra de Salud, Carla Vizzotti, inició hace un tiempo una serie de encuentros con referentes de la CGT, para buscar consensos para lograr una reforma del sistema de salud, que permita integrar la atención de los tres sub-sectores que existen hoy. El tema genera alarma en Azopardo, ya que temen que los cambios generen un desfinanciamiento de sus obras sociales, o que queden subordinadas al sistema estatal. La idea es apoyada por el Consejo Federal de Salud (COFESA), y cuenta con el aval de la Casa Rosada. Pero para un grupo de gremios y entidades sanitarias la propuesta “es más de lo mismo”, y la rechazan de maneja tajante. Se trata de un colectivo denominado Multisectorial por el Derecho a la Salud, que ayer martes realizó el primer acto público para marcar sus diferencias respecto de la propuesta, que se suma al proyecto que tiene el kirchnerismo para realizar cambios en el sistema de salud del país.

La actividad de este martes frente al Ministerio de Salud fue encabezada por la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA) y los integrantes de esta multisectorial, que se expresó contra el proyecto de Vizzotti, que si bien no se conoce en detalle, es parte de una propuesta que se negocia con la dirigencia de la CGT. Ante el avance del proyecto, que cuenta con el aval del COFESA –que reúne a los ministros de Salud de todas las provincias –la Multisectorial por el Derecho a la Salud planifica una serie de actividades donde repudiarán la iniciativa a través de una radio abierta.

Según Jorge Yabkowski, vicepresidente de FESPROSA, la propuesta que motoriza el Ministerio de Salud “es más de lo mismo, reedita la autogestión menemista de los 90, el Plan Federal de Salud de Ginés González García, que dicen que es uno de los inspiradores del borrador”. Ante la consulta de Política del Sur, el dirigente agregó lo que se negocia “tiene similitudes con la “Cobertura Universal de Salud (CUS), el plan privatizador de Mauricio Macri, tiene el mismo espíritu de planes focales mínimos a la atención primaria de los pobres, y de fomento de los negocios a través de los subsidios a los sectores empresariales y sindicales de la salud”. “El proyecto no tiene ni una palabra sobre los trabajadores ni la producción pública de medicamentos, sueros y vacunas. La famosa integración es de los privados con subsidios del Estado”, destacó Yabkowski.

En la última reunión del COFESA, Vizzotti informó de los consensos que va logrando la propuesta, en especial con la CGT, con cuyos dirigentes se reunió. En esas cumbres, según puso saber Política del Sur, la preocupación de los dirigentes son los millonarios fondos que el Gobierno se comprometió a girar a las obras sociales, cerca de 35 mil millones que todavía están “pisados” por la cartera sanitaria. En este punto, existe un cuestionamiento cada vez más grande a la gestión de la funcionaria, que hoy genera desconfianza entre la dirigencia.

Volviendo a la actividad de este martes, uno de los puntos que rechaza FESPROSA es que a partir de la información que circula, no hay tampoco avance en la creación de una paritaria nacional de salud, un viejo anhelo de la entidad, que en estos días cobra vital importancia por los muchos conflictos que existen en todo el país. En este sentido, la conducción nacional de la federación se reunirá el próximo 10 de junio donde se podría lanzar una medida de alcance nacional, por los reclamos sectoriales y contra la reforma sanitaria. “Motivos sobran, hay que evaluar el momento y las fuerzas dispuestas para una jornada de envergadura que sea capaz de modificar la agenda del Ministerio de Salud”, aseguró el vicepresidente de la entidad.

Además de la propuesta que analiza Vizzotti, existe un proyecto para integrar los sistemas de salud, que motoriza la fundación Soberanía Sanitaria, entidad cercana a La Cámpora y cuyo referente es el ministro de Salud provincial, Nicolás Kreplak. El mismo intenta poner los tres sub-sistemas bajo coordinación nacional, y crear una ley de financiamiento de la salud, entre otras cuestiones. La propuesta fue rechazada por el sector privado de la salud.