El secretario general del Sindicato de Empleados y Obreros de Comercio y Afines de Zona Oeste (SEOCA), Julio Rubén Ledesma, dialogó con Política del Sur sobre el conflicto en la empresa Garbarino y advirtió que los empleados “hace dos años que no cobran, esto es una estafa”.
También criticó a la dirigente del PRO Patricia Bullrich, quien responsabilizó a los empleados por la situación que atraviesa la firma. “Eso es lavarse las manos y los trabajadores lo único que exigimos fue que se nos pague el sueldo. Los conflictos y las asambleas empezaron a llevarse adelante cuando nos dimos cuenta de que la estaban vaciando”, recalcó.
Asimismo, fue poco optimista sobre la conciliación obligatoria que dispuso el Ministerio de Trabajo ya que estimó que “no van a cumplir, lo único que buscan es dilatar y quebrar la empresa”. “Quisieron instalar una modalidad de venta, que va a tener poco éxito, igual lo de ellos está focalizado en la terrible estafa en connivencia, no sabemos bien con quién porque nadie pudo hacerles nada ni obligarlos, ni embargarlos ni nada. Planteamos todas las posibilidades y nadie hizo nada”, subrayó.
Cuestionó que desde la empresa “se burlan de la legislación laboral vigente” y remarcó: “Siempre hemos acompañado a los trabajadores y lo seguiremos haciendo, no vamos a dejar morir a los perjudicados ni de sed ni de hambre”.
En este marco, el secretario General de SEOCA arremetió contra el dueño de Garbarino, Carlos Rosales, y planteó que “tiene negocios, sino como hace de sponsors en algunos equipos, dinero tiene, habría que investigarlo de dónde sale”. “Es una estafa real, no hay nada más que decir, son estafadores que planificaron, esto va a concluir con la venta de las cosas que les queda”, evaluó.
Luego el dirigente sindical habló sobre la postura del Gobierno nacional en este problema que afrontan los trabajadores de Garbarino. “Hemos ido dos veces a Presidencia, nos acompañó el compañero Juan Manzur y nos atendió Alberto Fernández, pero la voluntad política hay que afianzarla con hechos concretos”, manifestó.
Consideró que “hay predisposición pero lo que no puede hacer el nuevo Gabinete es magia ni milagro, acá la estafa ya está consumada”. “Lo que hay que hacer es sacarle los activos que les queden, rematarlos y pagarle lo que se les debe a los trabajadores, como dicta una ley de quiebra. Otra cosa no se puede hacer, hay que darles a los empleados que no tienen para comer, están esperando con engaños, con firmas de convenios o acuerdos que no se cumplen”, sentenció.