La izquierda se ubicó como tercera fuerza y pelea para meter concejales en el conurbano bonaerense

Tras la derrota del Frente de Todos y el triunfo de Juntos, el Frente de Izquierda y los Trabajadores-Unidad logró captar el voto bronca del oficialismo, sobre todo en la Tercera Sección Electoral donde la fuerza estaría obteniendo dos bancas en la legislatura bonaerense y tendría, por primera vez en la historia del partido, concejales en diversos distritos del conurbano bonaerense.

Si bien se trató de instalar el auge de la extrema derecha, en el conurbano bonaerense la izquierda calificó a la elección de las Primarias, Abiertas y Simultáneas como “histórica” y esto se demuestra en los resultados que arrojaron las PASO. El caso más destacado fue en la Primera Sección, puntualmente en Merlo, donde el Frente de Izquierda sacó más de 20 mil votos, un 8,78 por ciento, y de repetirse estos números en las Generales obtendrían entre una o dos bancas en el Consejo Deliberante.

Obtener una banca por primera vez

En cuanto a la Tercera Sección la fuerza sacó puntajes por encima del 7%. En Almirante Brown el Frente de Izquierda obtuvo el 7,4 por ciento de los votos. “El resultado que se dio en lo local es un poco lo que se vio también a nivel provincial y nacional. Los resultados superaron lo que predecían las encuestas y tiene que ver con la bronca que hay en la sociedad”, aseguró Mónica Méndez, cabeza de lista del FIT en el distrito.

En esta localidad, el intendente Mariano Casacallares tiene 15 concejales propios y para seguir manteniendo la misma cantidad debería conseguir ocho bancas en noviembre. En las elecciones de 2017 solo Unidad Ciudadana y Cambiemos entraron al Concejo y si esta vez ingresa también el FIT, el ahora Frente de Todos no tendrá los mismos escaños.

Méndez sostuvo que el resultado tiene que ver con la construcción de casi 11 años del FIT y también con que “la gente canalizó la bronca contra el Gobierno” en la izquierda.

“Hay otros municipios que también han hecho una buena elección. Para nosotros representa un desafío enorme, porque tenemos que seguir peleando para tener bancas tanto a nivel local, provincial y nacional”, aspiró para noviembre Méndez.

Otros de los ejemplos que anima al Frente de Izquierda es Presidente Perón donde obtuvieron el 7,46 por ciento de los votos y le sigue Berazategui con 7,02 por ciento. Distritos donde para las Generales estarían muy cerca de sumar en los recintos un concejal.

Continuando con el conurbano, si bien no llegan los porcentajes mínimos para una banca, para el FIT los números continúan siendo alentadores: Esteban Echeverría 6,21; Florencio Varela 6,73; Lomas de Zamora 6,16; Quilmes 5,68 y Avellaneda 5,63.

Por una banca en la Legislatura bonaerense y el Congreso Nacional

En el 2017 la lista que encabezaba Nicolás del Caño se llevó 321.464 votos y se perfilaba como quinta fuerza. Al comparar los resultados de las PASO de este año, el escenario es distinto, porque juntando ambas nóminas de la izquierda obtuvieron 432.923 votos, que representó el 5,22 por ciento, y en esta ocasión en la provincia de Buenos Aires se consagran como tercera fuerza. 

Con esos números dentro de dos meses estarían en la Cámara Baja Nicolás Del Caño y Romina del Plá, y con un 0,70% más podría entrar Néstor Pitrola.

“Estas elecciones nos ha dejado en la puerta de colocar dos legisladores por la Tercera Sección electoral, Guillermo Kane encabezando esa lista y la posibilidad de ingreso de concejales. Esto sería histórico, es la primera vez que estamos disputando realmente el ingreso de concejales a los Concejos tomando en cuenta el piso altísimo que hay en los distritos”, sostuvo Romina Del Pla a PDS.

Desde el oficialismo algunos coinciden en el análisis que la destacada elección de la izquierda se debe a un electorado que tiene muy en claro que su voto no iba a ser para la extrema derecha o Juntos y que por eso canalizó su bronca en un espacio como el FIT.

Por su parte, Del Pla manifestó que “el voto al Frente de Izquierda ha recolectado una parte importante de los desencantados de las políticas de Alberto Fernández, Cristina y Kicillof” y añadió que “también tiene que ver con que el retroceso del salario y el aumento de la pobreza”.

Si bien con los resultados obtenidos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se ha querido instalar que el ascenso de fuerzas de (extrema) derecha lograron acaparar el voto bronca, los números demuestran a una izquierda más fortalecida. La candidata territorial de la izquierda argumentó: “Está claro que hay un intento de que la crisis del sistema se va a canalizar hacia la derecha, pero ya el acercamiento de Javier Milei y Patricia Bullrich demuestra que es más de lo mismo y que es una colectora de Juntos por el Cambio.  Se cae la careta de la supuesta casta política, no creo que tengan margen de crecimiento”.

En este contexto, el Frente de Izquierda apuesta a poder atraer el voto de los desencantados y los antipolítica y convertirse en la alternativa a las dos coaliciones que disputan hoy el poder en el país.

“En muchos distritos tenemos el desafío de mantener e incrementar el porcentaje de la votación para poder dar un salto importante y sobre todo que esté la voz de la izquierda en los Concejos, como instrumento de alerta”, sentenció Del Pla.