No solo la cuestión electoral tiñe el panorama legislativo, aunque es bueno reconocer que ocupa un importante trazo de tiempo, sino que otras preocupaciones le imprimen una dinámica especial al Parlamento bonaerense, impropia, por cierto, en tiempos de cierre de listas.
En ese sentido, PDS pudo saber que han comenzado a desplegarse una serie de encuentros informales entre las principales espadas legislativas a fin de infligirle rapidez al tratamiento de una propuesta del Ejecutivo que hoy día desvela al gobierno de Axel Kicillof: la reforma a la ley de la Caja del Banco Provincia.
Este proyecto que envió recientemente el gobernador busca compensar de alguna manera la sangría de recursos que le cuesta a la provincia los juicios antepuestos por integrantes de la asociaciones sindicales del rubro bancario y por jubilados particulares, luego de la reforma dispuesta por el gobierno de María Eugenia Vidal, que propició un aumento de la edad jubilatoria para las mujeres bancarias como, asimismo, el desguasamiento de importantes derechos adquiridos a lo largo de muchos años de lucha.
El resultado de un importante número de demandas al gobierno provincial sin dudas que ha encendido las alarmas en el Ministerio de Economía provincial que capitanea Pablo López, debido a que un goteo insistente de dinero que debe erogar la provincia a los damnificados se combina con el acrecentamiento del déficit crónico que perdura en la caja jubilatoria.
Ante la decisión del gobierno provincial de avanzar con esta nueva ley para evitar más pérdidas en el erario provincial y efectuar un torniquete al desfasaje de recursos que hoy ostenta el sistema jubilatorio del BAPRO, es que los diputados y senadores del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio han comenzado consultas preliminares para tratar de darle un tratamiento express cuanto antes a esta propuesta.
Según pudo averiguar PDS de fuentes ligadas a las negociaciones, si bien la iniciativa aún no tomó estado parlamentario y por lo que no ha podido comenzar el análisis formal en comisiones, sí se han llevado a cabo encuentros en los campamentos políticos para evaluar los principales lineamientos de la propuesta con la intención de darle entrada y discutirla el mismo día, con indispensables consensos alcanzados entre las dos fuerzas políticas mayoritarias.
La intención del Frente de Todos, según pudimos consignar desde este portal, es llevarla al recinto la primera semana de agosto, una vez transcurrido el receso invernal, y ya lejanos los resquemores que puedan haber quedado diseminados entre los actores legislativos luego cierre de listas.
En dialogo con PDS, el diputado peronista Walter Abarca se mostró enteramente satisfecho con el proyecto enviado por Kicillof: “Viene a poner coto a las irregularidades que se habían dado desde que Vidal les sacó beneficios propios a los jubilados del Banco Provincia”, manifestó.
“Hoy, el gobierno bonaerense se está haciendo cargo y pagando los juicios generados por aquel desatino del gobierno de Cambiemos que cercenó derechos adquiridos”, condenó.
Sin embargo, Abarca puso ciertos reparos a que la propuesta de Kicillof pueda ser tratada de forma complaciente en la próxima sesión: “Tengo mis dudas de que Juntos por el Cambio vote esto sin chistar, sería contraproducente con lo que defendieron hace dos años, seguramente llevará un tiempo de análisis más extenso para alcanzar algún grado de consenso”.
“Lo que sí está claro es que hay que darle una solución integral a los jubilados y pensionados y esto la oposición no puede hacerse la distraída ni mirar para otro lado, deben colaborar para solucionar integralmente lo que durante su gestión se decidió”, advirtió.
Fuentes ligadas al bloque oficialista del Senado también apelaron a la prudencia: “Nos espera un tiempo importante de negociación, aun muchos senadores no han tomado contacto con el proyecto debido a que no tomó estado parlamentario”, avisan.
Más allá de los escenarios de negociación que naturalmente se desenvolverán, es prioridad de los diputados peronistas tratarlo lo más perentoriamente posible debido a un pedido expreso del Ejecutivo bonaerense de acelerar las posiciones a fin de no tener que seguir pagando juicios y acrecentando paulatinamente el déficit de la caja jubilatoria.
Sostienen desde el gobierno de Axel Kicillof que la propuesta es superadora y en base a esos argumentos la oposición debe convalidar la misma debido a que el proyecto ha sido minuciosamente consensuado con las principales entidades sindicales y de jubilados y pensionados del BAPRO.
En rigor, el proyecto del Ejecutivo propicia la derogación de la ley de modificación de la Caja del BAPRO sancionada durante la gestión de María Eugenia Vidal en febrero de 2018: apunta a la construcción de un nuevo marco normativo que restituya y amplíe derechos de los jubilados y pensionados que componen la Caja del Banco de la Provincia de Buenos Aires.
Propone la ampliación del aporte de las personas afiliadas activas y pasivas (hasta el 16 y 12% respectivamente) y de las contribuciones obligatorias del Banco de la Provincia (hasta el 21%), sumadas a un nuevo régimen para ingresantes con 19% de aportes personales.
Además, incorpora una contribución adicional del BAPRO y una partida presupuestaria de la provincia en conformidad con los recursos disponibles y recuperando el rol de garante final del sistema previsional; y restituye una tasa de sustitución al 82% para el cómputo de haber inicial y del 75% para las pensiones.
También devuelve un derecho que había sido cercenado en 2018: vuelve a restablecerse la edad jubilatoria a los 60 años para las mujeres.
Los diputados de Juntos por el Cambio se encuentra imbuidos en las negociaciones por las listas, pero algunos de ellos se han apartado por un momento de los conciliábulos y han prestado su tiempo para comenzar a analizar los principales aspectos de la propuesta de Kicillof: en carácter de adelanto solo informan que están estudiando la iniciativa y que no han sacado todavía conclusiones definitivas al respecto.
“Pedimos tiempo para analizarlo y que no sea como las otras propuestas que envió este año el Gobernador que fueron tratadas casi sin examinar”, apuntó un legislador del PRO protagonista de las negociaciones.
“A simpe vista parece bastante irreal el proyecto, no se especifica claramente cuáles son las medidas para paliar el déficit crónico que arrastra la Caja, porque si vamos a creer que una partida del Ejecutivo va a compensar tal desfasaje es ilusorio, solo generará que pronto tendremos un acrecentamiento de déficit fiscal provincial, me parece que la discusión debe abarcar una solución que proceda de los recursos de la misma Caja, que se pueda avanzar en el saneamiento de los desequilibrios autónomamente, que era la intención a zanjar cuando se votó la normativa en 2018”, justificó el legislador amarillo.