GREMIALES | 5 ABR 2021

CRISIS ECONOMICA

Preocupación en la CGT por el ritmo de la inflación y la pérdida salarial

La dirigencia alerta que a los actuales niveles hacen difícil pensar en cumplir la pauta del 29 por ciento estimada en el presupuesto, y que funciona como una “paritaria oficial” para este año.




En medio de la preocupación del gobierno por la inflación, los salarios perdieron casi nueve puntos porcentuales frente al costo de vida en los últimos doce meses, lo que amenaza con impulsar aún más los índices de pobreza que llegan al 42 por ciento. Hasta enero, los sueldos acumularon en doce meses una suba del 29,6 por ciento, mientras los precios subieron 38,5 por ciento en el mismo período.

 

En febrero, la inflación fue del 3,6 por ciento mientras que en marzo, según trascendió de fuentes del Ministerio de Economía, habría trepado por encima del 4 por ciento, lo que complica aún más la recuperación del salario real.

 

Esa mejora es una promesa que le hizo el gobierno a la CGT en la última reunión que mantuvieron. A cambio, los sindicatos están cerrando paritarias que rondan el 29 por ciento, en línea con la proyección anual que hizo el Ministerio de Economía en el Presupuesto de 2021. Si esa previsión no se cumple, los gremios ya avisaron que pedirán reabrir los acuerdos salariales. Este escenario amaga con empeorar la caída de los salarios entre 2018 y 2020, justo cuando 2021 debería ser un año de leve recuperación, en un contexto de elecciones legislativas.

 

En enero los salarios subieron en promedio 3,3 por ciento, en especial por el repunte de los sueldos registrados, del 3,5 por ciento. Los datos del Ministerio de Trabajo coinciden con los del INDEC y reflejan que la pérdida del poder adquisitivo continúa, mientras los niveles de pobreza alcanzaron el 42 por ciento a fines de 2020. La caída de los ingresos es mayor si se la compara con la canasta alimentaria

 

Según el RIPTE (Remuneración Imponible de Trabajadores Estables), el salario promedio es de 68.100,73 pesos brutos. Doce meses atrás, el promedio de ese indicador clave había arrojado 53.070.21 pesos. La aceleración de la inflación en los últimos meses profundizó la caída del salario. Mientras el RIPTE reveló un alza del salario entre noviembre y enero del 5,2 por ciento y el INDEC una suba del 8,6 por ciento, la inflación en esos tres meses aumentó 11,6 por ciento.

 

En tanto, los ingresos de los trabajadores pierden aún más si en lugar de compararlos con el costo de vida se los mide con la canasta de alimentos. Es que en el mismo período la canasta alimentaria subió por encima de la inflación, un 14,6 por ciento.