Murió el gran artista chatarrero Carlos Regazzoni

Murió ayer a los 76 años el reconocido artista de Almirante Brown Carlos Regazzoni, quien se destacó por su excentricidad y sus grandes obras hechas con desechos de material ferroviario y demás elementos de chatarra reciclada.

Regazzoni nació en Comodoro Rivadavia y pocos años después se radicó en Longchamps. Era padre del concejal y excandidato a intendente de Almirante Brown, que tiene su mismo nombre. Falleció por la mañana en la Terapia Intensiva del Hospital Italiano producto de una infección urinaria complicada con un cáncer de vejiga.

“Se nos fue un grande! Abrazo Pa!”, escribió en su cuenta de Twitter su hijo Carlos Regazzoni para confirmar lo que había sucedido hacía unas horas. Y a ese tuit se sumaron muchos más para recordar al artista, con fotos y mensajes de despedida.

La creatividad de este artista plástico genial no apuntaba a lo puramente comercial, como tampoco se limitó a Almirante Brown, sino que diseminó sus trabajos por distintas ciudades del país e incluso Paris, Francia, donde residió un tiempo. Fue conocido por sus pinturas pero, sobre todo, por construir esculturas de diferentes tamaños, entre ellas enormes dinosaurios, hormigas, aviones y quijotes.

Su lugar en el mundo eran los galpones y talleres de la terminal ferroviaria de Retiro. Por allí cerca vivía, tenía su atelier y un restaurante, El Gato Viejo.