POLICIALES | 23 AGO 2019

INSEGURIDAD

Dolor por el hombre asesinado durante un cumpleaños en Temperley: "Arruinaron una familia sin razón"

A casi una semana del crimen de Rodrigo González, la Policía trata de identificar al asesino mediante el ADN de unas huellas halladas en un auto robado y las cámaras que filmaron el hecho.




La investigación por el crimen de Rodrigo González (35) atraviesa horas fundamentales para tratar de identificar al responsable del caso ocurrido el sábado a la noche, cuando la víctima recibió el impacto de una bala perdida mientras celebraba un cumpleaños en la casa de unos familiares en una vivienda de Temperley.

En diálogo con Política del Sur, Soledad, cuñada del hombre asesinado, expresó su dolor a cinco días de su muerte. “Era una persona espectacular que no merecía esto. Nadie lo merecía”, manifestó la mujer, y recordó que era padre de un nene de 9 años que, junto a su madre, deben afrontar la pérdida.

“Su mujer quiere tratar de volver a lo que era su vida cotidiana con lo traumático que significa todo esto. Es todo muy difícil empezar de nuevo y enfrentar día a día diferentes situaciones”, relató a este medio, y lamentó: “Arruinaron a una familia sin razón.”

El martes, efectivos de la Comisaría 3º de Lomas de Zamora encontraron el auto robado con el que el asesino había escapado del lugar del hecho. En el interior habrían hallado huellas del acusado con manchas de sangre, debido a que estaba herido al momento de su huida. Ahora, desde el entorno familiar de Rodrigo esperan los resultados del ADN para determinar la identidad del homicida.

Por su parte, la Policía analiza las imágenes de las cámaras de seguridad privadas aportadas por los vecinos de González, las cuales habrían captado el raid delictivo previo al asesinato. “Tienen huellas, las filmaciones y las caras de los tipos. Estamos a la espera de avances. Nos dijeron que nos quedemos tranquilos”, afirmó Soledad.

El sábado a la noche, Rodrigo, que era fanático de Racing, miraba el partido de la Academia contra River, cuando de repente una bala rompió el vidrio de una de las ventanas de la casa y le impactó directo en el pecho. Era un delincuente que, sin razón aparente, tiraba a mansalva desde la vereda de la vivienda, ubicada en Zuviría 477.

En total, habrían sido diez las vainas de bala que los peritos hallaron en la zona durante las primeras tareas investigativas. Después de herir a Rodrigo, que era empleado de una empresa de cable, el ladrón siguió con su raid. Dio la vuelta y entró a una casa. El matrimonio lo vio por la ventana y el delincuente les rompió la puerta a patadas, los encerró en el baño y les pidió la llave. Escapó en el Fiat Idea encontrado esta semana a 15 cuadras de la escena del crimen.

Minutos antes, abordó el auto de un policía retirado que se resistió a los tiros, por lo que no pudo concretar el robo y huyó junto a su cómplice, que escapó corriendo en otra dirección.