La Unión Cívica Radical (UCR) de Avellaneda llegará a las internas del 28 de octubre con dos nóminas. En líneas generales, la falta de acuerdo giró en torno a cuál de los dos sectores del partido existentes en el distrito tiene mayoría como para ubicar a sus candidatos en los mejores lugares.
A pesar de que los dirigentes de ambos sectores estuvieron hasta el jueves pasado intentando llegar a una lista de unidad, no fue posible, y entonces la decisión fue dirimir en una interna: por un lado, la lista 116 “Radicales en Cambiemos”, que postula como presidente al titular del PAMI local, Fernando Landaburu; y por otro, la 115, que lleva a Daniel Iozzolino a renovar su actual cargo.
En diálogo con Política del Sur, Landaburu consideró que “el radicalismo de Avellaneda hace tiempo que no fija posturas políticas prácticamente por ningún tema, que no se forman cuadros técnicos políticos, el partido ha desaparecido prácticamente de la calle”.
Por ese motivo, el dirigente anticipó que una de las propuestas, en caso de acceder a la conducción local de la UCR, es “crear un instituto de políticas públicas municipales” y “convocar a concejales, gente que hoy milita en actividades profesionales o barriales, o de sedes intermedias, que son radicales y pueden hacer un aporte significativo a la elaboración de una propuesta para Avellaneda”.
De esta forma, explicó que el objetivo es “fortalecer lo que es Cambiemos” y “que el año que viene la Comuna de Avellaneda tenga un intendente de Cambiemos”.
Según el referente, en el distrito hay unos 20 mil afiliados radicales en condiciones de votar, pero calculó que lo harán apenas 2 mil, debido a la desactualización del padrón. “Hoy por hoy, que existe Facebook, que existen correos electrónicos, que hay 20 millones de formas de llegar al afiliado por un WhatsApp, por lo que sea, tenemos un padrón donde no está registrado ni el celular de la persona”, criticó.
En ese sentido, consideró necesario mejorar esa situación para “llegar al afiliado con información, pero también para generar canales donde el afiliado pueda participar activamente y permanentemente”. También, destacó que la idea es “generar un ida y vuelta, donde el afiliado nos pueda contar qué está pasando en su barrio, qué ideas tiene para su barrio y para Avellaneda”.
En varias charlas con este medio, el actual presidente de la UCR avellanedense, Daniel Iozzolino, recalcaba que hoy en día no funciona la mesa de Cambiemos en el distrito. Al respecto, Landaburu coincidió y señaló que “en general, Cambiemos no ha creado ámbitos orgánicos”.
Sin embargo, aclaró: “Lo que es real también es que nosotros hemos participado de todas las actividades que se planificaron en Cambiemos en Avellaneda, y el sector oficialista no participó. Es difícil pedir participación y cuando hay que participar no están.”
Alfonsín
Por otra parte, al ser consultado sobre la actitud crítica que sostiene el ex diputado nacional Ricardo Alfonsín con respecto al rol del radicalismo dentro de Cambiemos y de algunas medidas económicas del gobierno nacional, Landaburu opinó: “A mí me parece que lo que uno tiene que hacer en el marco del partido es respetar lo que orgánicamente el partido ha resuelto”, en referencia a la Convención de Gualeguaychú, donde se decidió que la UCR integraría una coalición con el PRO.
En cuanto al diálogo que Alfonsín mantiene con referentes del peronismo como Eduardo Duhalde o Felipe Solá, el dirigente avellanedense fue tajante: “Las palabras de él hoy es que estaría cerca de dejar el radicalismo, lo dice él, a confesión de partes, relevo de pruebas”, dijo.
Y añadió: “Si Alfonsín lo que hace es tener charlas con sectores políticos, obviamente que lo hace de forma individual y no orgánicamente, porque él hoy no ocupa ningún cargo dentro del partido y tiene todo el derecho de hacerlo. Lo que yo por lo menos no imagino es una alianza electoral ni con Duhalde ni con Solá ni con ninguno de aquellos que están íntimamente relacionados con el populismo y con la corrupción de los últimos años en la Argentina.”
Además, más allá de los duros cuestionamientos de Alfonsín sobre la falta de protagonismo de un partido histórico como la UCR dentro de Cambiemos, Landaburu destacó que precisamente el radicalismo impulsó que se dé marcha atrás con el cobro a los usuarios de la compensación a las empresas por la devaluación del peso.
“Nuestra voz fue escuchada. El camino es ese, el radicalismo lo que tiene que hacer dentro de Cambiemos es tener sus ideas y debatirlas, por eso coincido con aquellos que plantean que tienen que haber más ámbitos orgánicos dentro de Cambiemos para que esas ideas puedan ser debatidas”, indicó.
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