Efectivos de la Policía de la provincia de Buenos Aires detuvieron a dos jóvenes de 20 y 22 años que estarían implicados en el crimen de Rubén Ibarra (53), un oficial retirado de la Prefectura Naval que se desempeñaba como custodio privado y fue asesinado el viernes en Ingeniero Budge durante un intento de robo cuando se iba a trabajar. 

Ambos fueron apresados en el marco de una serie de allanamientos realizados esa misma tarde. Sin embargo, el presunto autor material del asesinato se escapó: se trata de un menor de 17 años que se encuentra prófugo. 

Según consta en el informe policial, los uniformados pudieron establecer que la camioneta Ecosport utilizada por los criminales había sido robada en Villa Fiorito, donde fue abandonada e incendiada tras el asesinato. 

Con los elementos recabados en la investigación, personal de la Comisaría 10°, en forma conjunta con agentes del Distrito Lomas de Zamora Norte, DDI y la UPPL, llevaron a cabo cuatro órdenes de allanamientos ordenadas por la fiscalía. 

El imputado Marcelo Ezequiel Jara (22) cayó en una vivienda de la calle Azamor al 1800, donde secuestraron una pistola Bersa Thunder Pro 9 milímetros, mientras que Pablo Sebastián López (20) fue aprehendido en Ricardo Palma al 2100 con tres celulares en su poder que le fueron incautados. 

Otros dos domicilios registrados en la calle Montiel al 2500 y Comodoro Rivadavia al 1300 (donde se buscaba al presunto homicida), arrojaron resultado negativo. 

El dramático hecho tuvo lugar el 7 de febrero pasado en el cruce de las calles Quesada y Claudio de Alas en Ingeniero Budge. Allí, Rubén esperaba el colectivo que lo acercaría a su trabajo cuando fue sorprendido por cuatro delincuentes a bordo de una camioneta. Era un oficial retirado de Prefectura Naval que trabajaba como custodio privado durante las mañanas.

“Fue interceptado por cuatro hombres armados, quienes descienden de una camioneta Ecoesport con fines de cometerle ilícito y al ver que Ibarra estaba armado, le efectúan tres disparos. Luego aprovecharon para sustraerle su arma de fuego, una pistola Bersa Thunder Pro Nro D53201 y un teléfono celular marca Motorola, para luego darse a la fuga”, indicaron los policías a cargo de la investigación.  

La causa, caratulada como “homicidio en ocasión de robo, tenencia y portación ilegal de arma de guerra”, está en manos de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.