El fin del proceso electoral de este año profundizó aún más las diferencias políticas entre el PRO y un sector de la Unión Cívica Radical. Así, por ejemplo, se vio el viernes pasado en Lanús, cuando previamente a la sesión en el Concejo Deliberante, el bloque Juntos por el Cambio presentó su lista de concejales sin la presencia de uno: Lucas Folino, quien pertenece al sector del radicalismo que apoyó al justicialista Edgardo Depetri en su candidatura a intendente.

El sector de Folino es el más crítico al gobierno de Mauricio Macri y al rol que viene teniendo el partido centenario dentro de Cambiemos. El mandato del edil radical terminará el 10 de diciembre, y en ese marco, lo hará con un monobloque.

“Hay que tomarlo como una expulsión, me expulsaron del bloque”, afirmó el concejal, y agregó que tal situación ocurrió “no por votar distinto, sino por pensar distinto”. Por esa razón, opinó que “esto termina siendo una persecución política cien por ciento”.

Asimismo, contó que a varios correligionarios que coincidían con la postura del sector radical díscolo “los pusieron a disposición del personal”. “Como a mi señora, sin justa causa, que trabajaba en el Concejo Deliberante hacía diez años. Y a personas que estaban trabajando conmigo les sacaron la comisión y los mandaron a lugares como a parques y a cortar el pasto, como se diría”, enunció.

Además, recordó que él también fue empleado municipal durante 16 años. “Siempre hice campaña en contra, nunca tuve ningún problema con ningún jefe ni directivo. Esto es un país democrático, uno puede militar las ideas que quiera. Mientras que en su trabajo cumpla con lo que tiene que hacer, no tiene por qué sufrir una persecución”, sostuvo.

También, Folino destacó su participación “en todas las sesiones, no faltando a ninguna”, como así también en las comisiones, acompañando “todo lo que venía desde el Ejecutivo”.

Según relató, se enteró de su salida de la bancada por periodistas que le mostraron la lista, ya que ningún concejal oficialista le avisó. “Lo bueno hubiese sido enterarme por la gente del bloque y no por los medios. Nadie habló conmigo”, aseveró.

Relación con la UCR

En cuanto a la situación del radicalismo en Lanús, Folino admitió que no hay relación entre ambos sectores, es decir, por un lado, el del presidente, Leandro Bechara Arcuri, y por otro, el del vice, Elio Torre. “No tengo diálogo con el partido, sí constantes charlas con Elio Torre, con la otra parte no he hablado”, reconoció el edil.

Por lo pronto, el dirigente boina blanca planteó que “la UCR ahora tiene que reconstruirse, empezar a trabajar, a buscar a todos los que estamos pensando igual, que es mucha, y a veces es más la gente que está afuera de la orgánica del partido y piensa igual, que la que está en la orgánica”.

Apoyo a Depetri

En cuanto al acompañamiento de su sector de la UCR a Depetri, negó que haya sido un “error”, y por el contrario, lo ratificó.

“Ratifico cien por ciento. En política, las decisiones que se toman es siempre pensando, es lo que uno considera, y nosotros consideramos que Edgardo Depetri era mejor candidato, que iba a hacer una Municipalidad mucho más amplia, abierta a todos los sectores, y seguimos pensando que era lo correcto”, recalcó.

De todos modos, dijo que no le sorprendió el triunfo del intendente Néstor Grindetti, debido a que -opinó- “la gente habrá valorado la gestión”, que “fue muy buena”. “Lo que no consideramos fueron los tratos y cómo se manejaban ideológicamente las cosas”, indicó.

En ese sentido, se mostró en desacuerdo con la forma en que se encaró la campaña para las generales, más localista, con el corte de boleta, ya que -según remarcó- lo que se habría buscado con ello es “dejar a nuestro presidente afuera o escondido, a nuestros diputados nacionales radicales, nuestro vicegobernador radical, nuestra gobernadora y los senadores. Nosotros no podíamos permitirlo”.