El titular de Industriales Pymes Argentinos (IPA) aseguró que durante el último año cerraron 1734 pymes en todo el país, debido a la crisis que azota al país. Asimismo, 51.639 personas perdieron sus puestos de trabajo. “Sólo con parches no podemos sostener las fuentes de empleo. Si no hay medidas concretas, va a haber más cierres”, observó el presidente de la asociación.

El inquietante dato surge a partir de un estudio de la agrupación de pequeños y medianos empresarios de la industria nacional: más de 1700 pymes cerraron y, a raíz de esto, alrededor de 51.700 empleados debieron ser despedidos. Esta tendencia, según advirtieron, podría continuar tras la devaluación de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), por lo que exigen medidas urgentes, que no sean “parches”.

“En 2016, comenzó un proceso de reducción de empleo industrial que continúa hasta el presente ya que hay 128 mil trabajadores menos. El proceso se agravó desde el segundo trimestre del 2018, coincidentemente con la crisis financiera del país”, fue una de las tantas conclusiones que expresó IPA luego de su detallada investigación.

El presidente de la entidad, Daniel Rosato, se sumó a los análisis elaborados y aseguró que “en estos últimos 15 días, la situación ha empeorado porque las ventas cayeron en un 50 por ciento”. Ante esto, en diálogo con Diario Popular, enfatizó: “Sólo con parches no podemos sostener las pymes y las fuentes de empleo. Si no hay medidas concretas, va a haber más cierres.”

A su vez, explicó: “Muchas industrias compran gas en boca de pozo y pagan las facturas con el dólar a 50 pesos, pero después cobramos lo vendido con la divisa a 45. Eso genera una pérdida muy importante, que te vuelve inviable producir y lleva a una retracción muy importante“. Además, se lamentó porque “hay mucha especulación”, aunque “todavía no esté todo muy caro”.

Por su parte, el vicepresidente de la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGERA), Ariel Aguilar, comentó: “Hicimos ventas y no habían mandado los cheques. Cuando los recibimos, perdimos toda la rentabilidad porque los insumos básicos están hoy entre 15, 20 y 25 por ciento más. Y no podemos trasladar todo a los precios porque las ventas siguen cayendo.”

Continuando con sus críticas hacia la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), aseveró: “Ha jugado un papel asfixiante. Había embargos todos los días y te caen en todas las cuentas, entonces no podés pagar los sueldos. Además, muchos industriales que no habían sido embargados pagaban salarios, tarifas o impuestos, y tenían que elegir. Atrasarse hizo que justamente cayeran los embargos.”