El Rojo de Avellaneda hacía su estreno en el torneo local ante el Halcón de Varela en condición de visitante. Sebastián Beccacece volvía al Norberto Tomaghello, pero esta vez en el banco de enfrente. Cosas del destino debutar contra su ex club.

Lindo clima se vivió en Florencio Varela. Mucho público de ambos equipos, ya que la parcialidad de Independiente colmó la tribuna visitante (cerca de tres mil personas se hicieron presentes) y la gente que asistió para ver a Defensa y Justicia también lo hizo en gran número, redondeando un marco perfecto para una primera fecha de Superliga.

En el inicio del encuentro, ambos conjuntos compartieron el protagonismo del mismo. Con un esquema 4-3-3, tanto Mariano Sosso como Beccacece propusieron un juego caracterizado por transiciones rápidas, tenencia de balón y llegadas concretas hacia el arco rival.

En ese contexto, Independiente contó con la chance más clara para marcar a los diez minutos a través de Cecilio Domínguez, quien intentó definir ante la salida de Ezequiel Unsain, pero el arquero de Defensa achicó bien y tapó el remate desviándolo hacia el córner.

Hasta ese momento, ninguno de los dos equipos podía llegar a tener profundidad. Sin embargo, en el duelo de agresividad el Rojo lograba aproximarse con intermitencias pero con mayor peligro. Insistía por la derecha con Domingo Blanco, quien alternó buenas y malas, sumado al aporte de Juan Sánchez Miño, esta vez actuando como lateral por izquierda, aunque siempre con peligrosidad.

Tuvo otra chance en los pies de Gastón Silva, quien mediante un tiro libre elevó su remate, que pasó cerca del travesaño. El Rojo era más, pero también sufría la falta de un nueve de área, tal cual le ocurrió en el partido ante los ecuatorianos. De todas formas, el debutante Sebastián Palacios se las ingeniaba para oficiar de “falso nueve”.

Por su parte, el conjunto local sólo pudo incomodar a Martín Campaña a los 19 minutos, cuando tras un desborde de Rafael Delgado, quien dejó desairado a Nicolás Figal, remató fuerte y alto por encima del travesaño.

Independiente pudo encontrarse con el gol a los 33 minutos, cuando un centro al área de Figal tuvo el defectuoso rechazo de Marcelo Herrera y la pelota le quedo servida a Palacios, quien con un fuerte derechazo hizo inútil la reacción de Unsain. El Rojo justificaba lo hecho en la primera parte y el predominio podía traducirlo en la red, antes del cierre de la primera parte.

Además, se mostraba movedizo Martín Benítez, quien intentaba desde afuera del área ampliar el marcador, y un tiro libre suyo se estrellaría contra el travesaño. La presión alta que ejercía el Rojo de Beccacece no le permitía salir a Defensa con pelota dominada, y eso producía un encuentro lleno de condimentos y de fricciones en el mediocampo también.

En el complemento, Independiente no pasó demasiados sobresaltos. Defensa buscó por todos los medios el empate, pero el conjunto visitante no sufrió demasiados embates de los dirigidos por Sosso.

El entrenador del Rojo empezó a realizar cambios, ya que Nicolás Domingo se sentía extenuado y le cedió su lugar a Francisco Silva, y más tarde ingresó Cristian Chávez por Cecilio Domínguez.

Independiente aguantaba el resultado e intentaba un contragolpe para poder liquidar la historia. Lo tuvo con un tiro libre de Gastón Silva, pero Unsain detuvo correctamente el disparo y luego una corrida de Chávez que alcanzó el despeje de Gonzalo Piovi.

Así las cosas, se llegó al final del encuentro. Gran victoria de Independiente en Florencio Varela ante el subcampeón de la última Superliga. Seguramente, tendrá muchas cosas por corregir el conjunto de Avellaneda, pero habrá que destacar puntos positivos de un equipo que se encuentra en formación pero que lentamente va notando la mano de su entrenador.