Este miércoles culminó la etapa de alegatos del juicio por el crimen de Pablo Tito, que continuará el martes a las 12 con el veredicto. Durante la jornada de ayer, las partes replicaron lo expuesto el viernes, mientras que uno de los acusados sostuvo su inocencia.
La semana próxima, los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 de Lomas de Zamora serán los encargados de dar a conocer el resultado final del proceso judicial contra Maximiliano Díaz, Natalia Da Luz y Daniel Matorras, imputados por el homicidio ocurrido el 25 de marzo de 2016 en Banfield.

En la jornada de ayer, la abogada querellante, Florencia Calió, quien había pedido la pena de prisión perpetua por “homicidio criminis causa”, sostuvo las acusaciones contra los tres detenidos y desestimó lo planteado la semana pasada por la fiscalía y los letrados defensores.

“Esta parte entiende que las pruebas incorporadas durante los debates son suficientes para llegar a una condena por el hecho”, reiteró la querella, mientras que las partes acusadas mantuvieron su solicitud de absolución y apuntaron a “testimonios contradictorios”, en referencia a algunos testigos que prestaron declaración.
 

Por su parte, el imputado Matorras hizo uso de la palabra previo a conocer la sentencia. “Quiero que se haga justicia”, expresó ante los presentes en la sala, mientras que el resto se mantuvo en silencio.

La semana pasada, el fiscal Jorge Bettini había retirado las acusaciones al considerar que las pruebas no eran suficientes para comprobar la responsabilidad delictiva de las personas juzgadas, al igual que los representantes de la parte acusada. De esta manera, el juicio por uno de los hechos de inseguridad más resonantes de los últimos años en la región llega a su etapa final. “Tenemos la convicción de que son responsables del crimen”, concluyó Calió en diálogo con Política del Sur. 
 

El hecho
 

El 25 de marzo de 2016, Pablo Tito fue abordado enfrente de su casa, en Roldán y Ñanduty (Banfield), por seis personas a bordo de tres motos que pretendían asaltarlo. 
Los “motochorros” lo balearon y huyeron del lugar sin concretar el robo, mientras que la víctima falleció en el Hospital Luisa Cravenna de Gandulfo de Lomas de Zamora a causa de la gravedad de la herida. Desde entonces, su familia comenzó una campaña de reclamo de justicia hasta llegar a la instancia de juicio contra los primeros tres detenidos.