Por: Por Diego Lanese

A mediados del año pasado, editorial Atlántida dejó de ser parte de los medios del gigante mexicano Televisa y pasó a manos nacionales. La tradicional editora de revistas prometió una nueva etapa, luego del cierre de varias redacciones realizado por el grupo internacional. Pero en enero la empresa anunció el cierre de varias ediciones que venía realizando, lo que derivó en una serie de “despedidos indirectos”. Esta semana, la crisis se profundizó con el despido de al menos 15 trabajadores de prensa, que no pudieron ingresar a sus lugares de trabajo por orden de la firma.

 

Ante eso, el martes hubo un paro de actividades y ayer se anunció un plan de lucha para finalizar con los despidos y pedir la reincorporación de los cesanteados, que concluirá con un paro de dos horas el próximo lunes y una movilización. La crisis en los medios se profundiza, y según el gremio de prensa, esta es una de las peores etapas de los últimos años.

 

Los despidos en Atlántida fueron confirmados por la Comisión Interna, que rechazó la maniobra de la firma, la cual según las últimas versiones recogidas por Política del Sur, podría presentar la quiebra en los próximos días. En tanto, los empleados realizaron un paro de actividades este martes para pedir la reincorporación de los cesanteados, que en la mayoría de los casos tenían unos diez años de antigüedad.

 

“Los trabajadores que estaban en esta lista no pudieron entrar y les dijeron que vayan a sus casas, que les iba a llegar el telegrama”, explicó Félix Vallejos, delegado de Atlántida. Esta metodología, usada por varias fábricas en los últimos tiempos, ocultaba que la firma inventó excusas varias para intentar despedir a los empleados sin pagarles la indemnización correspondiente.

 

“Las causas que estuvieron inventando son de las más diversas, tenemos un compañero que le cuestionan haberse sumado a una medida gremial, otro caso que dicen no hizo debidamente su trabajo, a otro por presentar un justificativo médico que no era válido. Se agarraron en cada caso de cuestiones muy tomadas de los pelos, muy fácil darse cuenta que el motivo es inventar cualquier cosa para no pagar indemnizaciones”, le dijo Vallejos a Política del Sur.

 

En abril de 2017 Atlántida informó el cierre de sus publicaciones Cosmopolitan, Vanidades, Harper’s Bazaar, Ser Padres, Runners y Muy Interesante, por entonces bajo la conducción de Televisa. Por esa medida, se despidieron a 21 integrantes de las redacciones, incluidos sus editores. A mediados de 2018, el grupo mexicano se desprendió de la editorial, que pasó a manos de un grupo de inversión argentino, que nombró al ex Perfil Federico Poletto como CEO.

 

Con promesas de renovar la empresa, el nuevo directorio comenzó a trabajar con varias publicaciones propias más otras licencias. Pero en enero de este año se anunció el cierre de las publicaciones La Valijita, La Súper Valijita, Para Ti Mamá, Para Teens y Para Ti Tejidos. “Con la decisión de dejar de imprimir estas impresiones, se generaron despidos indirectos de colaboradores, que no eran trabajadores de planta, pero que trabajan para la empresa facturando”, agregó Vallejos.

 

Luego de los despidos, la empresa no se comunicó con los delegados de los trabajadores y no entablaron ningún tipo de diálogo. Ante la falta de respuestas, se mantuvo el paro de actividades hasta la medianoche del martes, a la espera de algún contacto formal. Por eso, ayer los trabajadores decretaron un “estado de asamblea permanente” hasta el viernes y convocaron a un paro de dos horas para el lunes 11. A las 14 de ese día, se hará un acto frente a la sede de la editorial (Azporado al 500, Capital Federal).  

 

Este nuevo conflicto en el sector de prensa marca los problemas que existen en los medios. En medio de la crisis económica, la semana pasada el diario La Nación cerró su taller gráfico y despidió a los empleados del sector.

 

En el último Día del Periodista, en junio de 2018, el gremio de prensa Sipreba difundió un informe donde anunció que en 2017 “se relevaron 500 despidos directos, retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas” en diversos medios de comunicación. Según el trabajo, el desempleo se reparte entre despidos directos, con 46,1 por ciento de los casos, y retiros voluntarios (incluyendo jubilaciones anticipadas y otras modalidades de merma de empleos), con 53,9 por ciento.