

El Milrayitas continúa con la pretemporada en Lomas de Zamora tras su primer amistoso ante Instituto y la preparación física en Balcarce. En ese sentido, Gastón Guruceaga analizó la pretemporada: "Trabajamos muy duro, fue una semana en la que el profe nos mató. (...) Hubo mucha carga, pudimos hacer doble o triple turno", contó.
Además, el lateral derecho realizó un balance del amistoso ante el conjunto cordobés: "Me sentí bien, en un partido de pretemporada es muy difícil sacar conclusiones, fue un partido cerrado para los dos equipos. (...) Jugamos 40 minutos los supuestos titulares y creo que Instituto no nos generó peligro", opinó, pero admitió: "Tuvimos alguna que pudimos haber metido, fue un partido trabado."
En esa línea, el surgido de Newell´s Old Boys de Rosario comentó qué fue lo que le pidió el cuerpo técnico: "Habíamos hecho táctico los días anteriores e intentamos hacer una presión alta. (...) Sabíamos que Instituto iba a intentar generarnos peligro por afuera", detalló, y luego se sinceró, al reconocer que "el resultado mucho no importa, lo importante era hacer esas cosas que habíamos entrenado".
Respecto al pedido de la presión alta por parte de Gabriel Lobos, el defensor explicó de qué manera lo pusieron en práctica. "A los cinco o diez minutos en los que la presión no funcionaba, nos replegamos. (...) La presión alta es difícil de hacer por un tiempo sostenido y la pretemporada se basó en eso", precisó. Después, envió un mensaje que ilusiona: "Se pudo ver ese juego que le gusta a Los Andes, pero falta mucho todavía".
Ambos partidos terminaron en cero, algo que desde el sector defensivo no vieron con malos ojos: "El torneo pasado le convertían demasiado a Los Andes e intentamos mantener el arco en cero. (...) Tenemos un equipo con jugadores desequilibrantes que pueden convertir en cualquier momento", valoró, y recalcó: "Lo importante es mantener el arco en cero, después sabemos que alguna nos va a quedar."
Por otra parte, Guruceaga se refirió a su vuelta al Milrayitas y a los motivos por los que tuvo que emigrar: "Cuando me fui, mi idea era quedarme, pero por cosas que pasaron, me tuve que ir. (...) Eso me dejó una espina clavada, nunca me había querido ir", aseguró, y agregó: "Los Andes es un club en el que me siento muy cómodo, y apenas me llamaron, no dudé."
En esa línea, el lateral comentó qué cambios vio en el club desde su anterior paso: "Veo al club dando pasos importantes, quiere hacer las cosas serias, y eso es positivo. (...) Desde el primer día que llegué veo que se están haciendo las cosas mucho más ordenadas", sostuvo, y añadió: "Estamos todos muy contentos, tanto nosotros como el cuerpo técnico y los dirigentes."
Siguiendo con los cambios, en Los Andes hubo uno en el armado futbolístico. Al respecto, el defensor explicó que "se fueron muchos jugadores y llegaron otros tantos, es un cambio importante”, y consideró: “De a poco nos vamos acomodando y conociendo la forma de jugar de todos los compañeros". A la vez, recalcó que “lo más importante es que se armó un buen grupo, por lo que se vio en la pretemporada".
Por último, Guruceaga habló de su rol en el conjunto y de la forma en que lo recibió el cuerpo técnico: "Desde el primer día que llegué sentí la confianza de Gabi como de Lucho. (...) Me siento bien físicamente, quizás me falta ritmo futbolístico, pero eso se va dando durante los amistosos", precisó, y concluyó: "Me siento cómodo acá, siento que el cuerpo técnico me da confianza para poder hacer mi juego."